¿Qué tipo de libros se recomiendan para niños según su edad?
Estimular la inteligencia de los niños es una de las preocupaciones de nosotros los padres, junto con la alimentación, su talla y peso, que duerma de corrido, control de esfínteres, que hable y se mueva (gateo o caminar) a tiempo.
Buscar libros en tela con texturas que estimularan sus sentidos, y con colores vistosos que captaran su atención.
Donde las páginas eran grandes al igual que las imágenes, pero sin dejar de ser ligero para que pudiera tomarlo con sus pequeñas manos. Así, unos meses después, decidí fabricarle uno a mano para él.
Qué tipos de libros usar para cada edad en los niños. No olvidemos que en todas las edades siempre deben estar presentes , ya que garantizarán un enorme desarrollo cognitivo, pero sobre todo emotivo.
De 0 a 1 años
Libros sensoriales.
Donde puedan desarrollar los sentidos y la atención. Tienen éxito los dibujos o fotos grandes con colores vivos.
De 1 a 3 años.
Libros virtuales.
Que les permitan al niño una lectura acompañada de un breve texto, leído por un adulto.
De 3 a 6 años
Libros para que empiecen a leer.
El texto debe ir en el mismo tipo de letra que estén utilizando en la escuela para aprender a leer.
De 6 a 8 años
Primeros Lectores
Temas favoritos son de la vida cotidiana de niños y niñas que se pueden identificar, amigos, escuela, fantasía.
De 8 a 12 años
El texto va creciendo.
De acuerdo con el desarrollo lector del niño, los temas favoritos son: fantasías, deportes, amistad.
Crédito: Profe Denisse
Lectura por edades
Introducción
¿Qué tipo de libros debo ofrecer a mi hijo en cada edad? ¿Qué temas pueden interesarle? ¿Cuáles han de ser las características de los materiales de lectura que ponga en sus manos? Según la edad que tiene mi hijo, ¿hasta dónde tiene desarrolladas sus capacidades lingüísticas e intelectuales?
Estas son algunas de las preguntas que, más tarde o más temprano y con mayor o menor grado de preocupación, se formulan la mayoría de los padres a lo largo del crecimiento de sus hijos. Para responderlas hemos elaborado este estudio en el que iremos estableciendo para cada etapa cronológica los rasgos psicológicos, el tipo de lecturas apropiadas, sus temáticas y qué aspectos formales o de contenido habremos de valorar a la hora de facilitarles materiales de lectura.
No obstante, advertimos de que se trata de ideas generales, que en absoluto deben aplicarse como recetas ni utilizarse como un corsé universal para aplicar sobre todos y cada uno de nuestros hijos.
Recomendamos, muy al contrario, que sometamos nuestra reflexión al tamiz del conocimiento profundo e intransferible que como padres tenemos de nuestro hijo y aderecemos el cóctel con la fragancia del diálogo, la intuición y el sentido común.
1. Edad: 0-2 años
1. Etapa de desarrollo cognoscitivo y sus características. Etapa marcada por un desarrollo mental extraordinario. El niño conquista, a través de las percepciones y los movimientos, todo el universo práctico que le rodea. Lo refiere todo a sí mismo, a su propio cuerpo. A medida que se inician el lenguaje y el pensamiento se sitúa en un universo más amplio y exterior a él.
2. Tipo de lectura más usual
Son los adultos los que leen o narran al niño. Éste inicia una elementalísima lectura de imágenes.
3. Características de los materiales de lectura
Contaremos y leeremos historias que hablen de los sentimientos y estados de ánimo por los que pasa cualquier niño: tristeza, dudas, celos, búsqueda de cariño, afán de protagonismo, miedo, timidez, euforia…
Aunque el niño no entienda bien todas las palabras, la entonación y el ritmo, junto a las imágenes, atraerán su atención.
Cuando se introduzcan textos habrán de ser muy sencillos, predecibles y con vocabulario claro y de calidad, pero no ñoño, y próximo al mundo del bebé. Textos mínimos apoyados en una pequeña historia narrada en imágenes (o pictogramas) e historias para ocasiones especiales (paso de pañales a orinal, nacimiento de hermano, caída del primer diente…). Onomatopeyas. Acción dinámica y ágil.
Fotografías de personas familiares al bebé: familia, amigos, otros bebés (vistiéndose, jugando, bañándose)… Fotos de objetos familiares (de uso del bebé, la casa, el parque, juguetes…), con un texto repetitivo porque permiten iniciar el desarrollo de las habilidades de lectura.
En la mayoría de los casos se tratará de imágenes acompañadas de un pie de foto en el que se nombre el objeto o personaje que aparece en ellas.
Ilustraciones coloristas, imaginativas y humorísticas.
Los personajes –sonrientes, dulces y tiernos– podrán introducir al niño en el conocimiento elemental de los colores, los tamaños, las formas, etc.
Materiales resistentes y agradables al tacto: cartón, plástico, madera, tela… Bordes redondeados. Atractivos para todos los sentidos (que se puedan morder, oler, escuchar…).
Amplia variedad de formatos, tamaños, materiales y propuestas estéticas. Tamaño manejable para que puedan ir aprendiendo a manejar solos las páginas. Libros que inviten a manipularlos y a jugar con ellos: con pestañas, botones, troquelados, transparencias, materiales para diferenciar texturas, etc.
Proporción entre texto e imagen, con predominio casi exclusivo de esta última.
4. Temas
Vida diaria con sus rituales sencillos: comida, el baño, los juegos, el parque… Tradición oral: poemas, retahílas, nanas, cancioncillas, juegos acumulativos para repetir y gozar con el niño de la magia de la palabra.
2. Edad: 2-5 años
1. Etapa de desarrollo cognoscitivo y sus características. Comienza a construir los símbolos. Tiende a la interpretación «mágica» de la realidad. Confunde lo que es de sí mismo y lo que forma parte del mundo que le rodea. Construye sus conceptos a través de la manipulación directa. Distingue la palabra del objeto que representa. Es egocéntrico en su interpretación de la realidad. Aumenta su vocabulario a gran velocidad.
2. Tipo de lectura más usual
Prelectura: Comienza a desarrollar su lenguaje oral. Distingue el ritmo y el sonido de las palabras y percibe la relación entre éstas y las imágenes. Comienza a desarrollar su sentido de la narración.
3. Características de los materiales de lectura
Cuentos que introduzcan conceptos simples de forma, color, tamaño y número.
Cuentos que le permitan identificar objetos o nociones (las letras o los números…).
Cuentos cuyo eje sea un niño o una niña como él o ella.
Cuentos con lenguaje rítmico y repetitivo.
Cuentos de trama acumulativa o algo más compleja, con partes que se repiten.
Poemas sobre animales y relaciones de amistad entre niños.
Desarrollo: Argumento sencillo. Desenlace feliz siempre. Le interesa sobre todo el desarrollo de la acción, más que el desenlace. Desarrollo cronológico. Extensión muy breve. Evitar descripciones. Lenguaje sencillo, oraciones simples.
Presentación: libros con abundancia de ilustraciones, preferiblemente a color. Tipografía grande. Encuadernación resistente (tela, plástico, etc.).
4. Temas
Cuentos de hadas, de animales con comportamientos similares a los de un niño. Folclore y cuentos tradicionales: nanas, retahílas, canciones, trabalenguas… Libros de imágenes con historia (álbumes). Personificación de los elementos de la naturaleza.
Edad: 6-8 años
1. Etapa de desarrollo cognoscitivo y sus características. Pensamiento intuitivo. Experimenta terrores personales que son normales. Desarrolla el concepto de identidad individual y su autoestima. Tiene una rica imaginación que le ayuda a entender lo real. Ha desarrollado el concepto básico de la narración, una percepción selectiva y la observación. Tiene un concepto de moralidad absoluta.
2. Tipo de lectura más usual
Iniciación a la técnica lectora en la escuela. Usa textos cortos. Hace la lectura silábica y por palabras (según el método con el que se le ha enseñado a leer). Recurre constantemente a la ilustración para verificar su comprensión de lo leído.
3. Características de la narrativa que mejor se asimilan
Cuentos que le permiten entender y superar sus miedos y que le presentan la fantasía de modo verosímil, enriqueciendo su mundo interior.
Cuentos que le hablen de la importancia del individuo.
Cuentos con secuencia narrativa clara y unidireccional.
Cuentos de trama predecible, pero con finales sorprendentes, felices y justos, que le permitan desarrollar su capacidad para percibir detalles.
Obras de teatro que se puedan representar (con títeres, sombras, marionetas…).
Libros informativos en distintos soportes (papel o electrónico) que despierten el interés del lector sobre los temas que le interesan.
El contenido será adecuado a la edad del niño y a sus intereses. Con argumento, suspense y aventura. Debe haber continuidad de acciones o de movimientos. Pocos personajes, para no desviar la atención del niño.
Escrito en estilo directo, con diálogos frecuentes. Onomatopeyas de animales o de acciones o movimientos. No muy largos, comprensibles y convincentes. Impregnados de alegría y buen humor.
Serán atractivos visualmente. Las ilustraciones –preferiblemente en color– deben estar sincronizadas al texto para reforzar la comprensión.
4. Temas
Cuentos de hadas, clásicos europeos, fantasía e historias de animales domésticos que hablan, cuentos maravillosos, máquinas personificadas, ambiente familiar (hogar, escuela, amigos, juego…) y humor.
5. Evitar siempre
Todo tipo de reflexiones que el niño no suele entender. Crueldad de hechos o personajes. El terror que amedrenta a los niños. El sentimentalismo: el niño es sensible, no sentimental. La metáfora pura: el niño puede comprender una comparación, pero no una metáfora.
4. Edad: 9-11 años
1. Etapa de desarrollo cognoscitivo y sus características. Reconoce la existencia de opiniones distintas a la suya. Desarrolla preferencia por los temas realistas y pide que se le expliquen los reglamentos de las cosas. Reconoce la posibilidad de interpretar palabras y hechos de diversas maneras. Recuerda y organiza los conocimientos, separando pensamiento de percepción y acción.
2. Tipo de lectura más usual
Desarrolla una mayor autonomía en la lectura. Lectura comprensiva de textos cortos y sencillos de ficción, incluso sin ilustraciones.
3. Características de la narrativa que mejor se asimilan
Narrativa que incluya claramente la diferencia de puntos de vista del narrador y el personal más complejos. Narrativa con episodios. Primeros libros por capítulos.
Vocabulario de lectura fácil.
Historias, eventos y ubicaciones definidas y reales.
Narrativa que use diversas figuras de expresión.
Personajes con los que sea posible identificarse. Les apasionan las series protagonizadas por jóvenes de su edad.
Se interesan por todos los géneros: cuentos y novelas, teatro para representar, poesía, cómics, libros informativos…
Desarrollo: argumento completo y coherente con final claro. Acción ágil. Sin saltos en el tiempo. Extensión breve, que lo puedan leer de un tirón. Estilo directo claro. Vocabulario sencillo. Frases no muy largas. Sincronización entre ilustraciones y texto.
Presentación: libros con imágenes, preferibles en color y que refuercen la comprensión del texto. Tipografía grande.
4. Temas
Cuentos fantasiosos. Historias de animales humanizados. Inventos fantásticos. Objetos animados. Humor absurdo, disparates. Terror. Ciencia ficción. Folclore y cuentos tradicionales clásicos. Mitos. Aventuras del ambiente más cercano: familia, escuela, amigos… Cuentos sobre sus propios problemas. Cuentos modernos. Novelas cortas.
5. Edad: desde 12 años
1. Características de la narrativa que mejor se asimilan. Al mejorar la competencia lectora, le interesan los personajes con problemas como los suyos y las aventuras de pandillas en las que se proyecta, aunque también busca misterio, cuentos fantásticos y clásicos, cómics, biografías, deportes y juegos, pueblos lejanos, humor, animales reales o fantásticos, inventos, ciencia y experimentos para niños, incluso poesía que le hable de sentimientos (por ejemplo, de ese amor que comienza a sentir). Acción, ambiente y caracteres vigorosos y dinámicos. No deben dejar en el niño dudas irresolubles.
Frases no demasiado largas ni complejas. Se inicia el desarrollo de la conciencia social por lo que busca argumentos que contengan problemas humanos –sociales o políticos– y alterna las lecturas intimistas con la acción y la aventura.
Se perfilan los itinerarios individuales de lectura que el joven jalona de aquellos libros que le permitan reafirmar su personalidad. El adolescente necesita modelos, héroes con los que se pueda identificar, espejos en los que reflejarse, ídolos con los que identificarse y que le ayuden a desinhibirse, a descargar adrenalina y en quien poder verter sus confidencias más íntimas. En la narrativa buscará soluciones a sus conflictos y respuestas a sus anhelos e interrogantes.
Los temas problemáticos –drogas, paro, delincuencia, sexo– son un tabú para su entorno familiar y por eso bucea en busca de novelas que traten estas situaciones desde perspectivas realistas y asépticas.
2. Presentación
Libros con algunas ilustraciones, siempre adecuadas al contenido textual. Tipografía similar a la de los libros de adultos. Resumen del contenido en la contracubierta. Libros en formato electrónico (enciclopedias, diccionarios, monografías sobre aficiones…).